Sevilla se volcó con el Señor
Fue como un Domingo de Ramos en medio del mes de junio, en el que las manos del Señor volvieron a despuntar con aires de primerizo azahar, prendiéndose en el alma de todos cuantos acudieron a la Basílica.
Fue como siempre sucedió en Sevilla, ante la llamada abierta desde la entraña de San Lorenzo.
Fue sosegadamente, guardando colas cuando tocaba guardarlas, llegando estas a la Alameda de Hercules ,porque así hace la ciudad las cosas cuando se sabe que hay que hacerlas, dando igual lo que se tarde.
Fue como cuando se espera en el recibidor del Hospital a que salga ese familiar enfermo al que le acaban de dar el alta médica.
Así fue todo lo que ocurrió ayer junto al Gran Poder, envuelta la jornada en millones de rezos, muchos de ellos dedicados al loco que intentó matar al Señor.
El Señor ya está en su casa.
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